La mujer que inspiró Torre, su nombre y su icono

La mujer que inspiró Torre, su nombre y su icono

Cómo la inquebrantable fortaleza, determinación y resiliencia de María Emma Torrenegra dieron forma al nombre Torre y su compromiso de hacer que el trabajo sea satisfactorio para todos

Por Alexander Torrenegra, CEO de Torre

“¿Qué hay en un nombre?” es una pregunta retórica que hoy suele usarse de manera ligera. Por supuesto, originalmente fue formulada con toda seriedad cuando Julieta reflexionaba sobre Romeo en la famosa obra de Shakespeare. Si estás familiarizado con su soliloquio, recordarás que concluye: “Eso que llamamos rosa, con cualquier otro nombre olería igual de dulce.”

Bueno, tal vez sí. Tal vez no. Estoy seguro de que estarás de acuerdo en que los nombres pueden tener un valor considerable por lo que llegan a representar. Es fácil pensar en varios ejemplos de inmediato.

Torre es también uno de esos nombres. Su significado en mi vida y en mi carrera como emprendedor, empresario e inversor ha sido, en gran parte, dictado por las circunstancias.

Siendo la primera mitad de mi apellido, “torre”, una palabra en seis lenguas romances. No es el apellido que me heredó mi padre; posteriormente lo reclamé y lo adopté legalmente de mi abuela por parte de mi madre.

Déjame contarte por qué.

María Emma Torrenegra nació en 1913 en Barranquilla, Colombia. Su padre, Olimpo Torrenegra, trabajaba en el puerto de la ciudad. Su madre, María Álvarez, era ama de casa. María Emma era la mayor de cinco hijos y creció en un entorno profundamente católico. Aunque notoriamente restrictivo, era el statu quo sociocultural y religioso prevalente en Colombia en ese momento. Estado e iglesia no estaban separados.

María Emma Torrenegra
María Emma Torrenegra

María Emma nunca terminó la secundaria. Aunque había escuelas primarias independientes para niños y niñas, solo había secundarias para varones; a las niñas se les negaba el privilegio de la educación secundaria. Como consecuencia, no podían asistir a la universidad, ya que se requería un certificado de secundaria para hacerlo.

Afortunadamente para María, en 1929 una mujer llamada Lady Chauvin fundó la Universidad Comercial del Atlántico. Fue la primera universidad para mujeres en Barranquilla y no requería un título de secundaria. María Emma fue una de sus primeras estudiantes. En 1933 se graduó con el único diploma que ofrecía la universidad: taquigrafía.

María Emma Torrenegra Diploma

Poco después de conseguir su primer empleo, ocurrió una tragedia: Olimpo murió en un accidente de tren en el puerto. Dado que su madre nunca había trabajado fuera de casa y sus cuatro hermanos aún estaban en la escuela, María Emma se encontró a cargo de mantener a toda su familia. ¡Uno solo puede imaginarse el desafío que esto representó para una mujer de 22 años viviendo en una sociedad tan patriarcal!

Sin embargo, salió adelante. No solo mantuvo a su familia, sino que, irónicamente, pagó la educación universitaria de sus hermanos varones, permitiéndoles obtener títulos que la sociedad le impedía a ella estudiar.

Maria Emma Torrenegra at her first job (Caja Colombiana de Ahorros, Barranquilla, Colombia)
María Emma Torrenegra en su primer trabajo (Caja Colombiana de Ahorros, Barranquilla, Colombia)

Dado que María Emma estaba tan enfocada en su trabajo, esperó hasta los 40 años para casarse. Dos años después tuvo a su hija Katia y, tres años más tarde, su esposo las abandonó. Una vez más, se encontró sola a cargo de una familia.

Pero María Emma crió bien a su hija. Para Katia, tener una madre tan autosuficiente le sirvió como ejemplo: ella también se convirtió en madre soltera de dos niños tras solo un año de matrimonio. Su esposo también la abandonó…

Katia y María Emma en el centro de Bogotá, circa 1969
Katia y María Emma en el centro de Bogotá, circa 1969

Yo soy uno de los hijos de Katia. Fui criado por mi madre y mi abuela. Ellas me enseñaron la mayoría de las cosas que me permitieron convertirme en el profesional que soy hoy: persistencia, trabajo duro, perfeccionismo y, lo más importante, confianza. Cuando tenía 14 años, tanto María Emma como Katia me animaron a perseguir mi sueño. El resultado fue mi primera empresa.

Cuando María Emma falleció en 1997, hice una promesa. Tan pronto como pudiera, cambiaría mi apellido de Henríquez a Torrenegra, el apellido de mi querida abuelita.

Inevitablemente, uno se pregunta qué otras profesiones podría haber ejercido María Emma. Tal vez podría haberse convertido en ingeniera, científica, médica o profesora. Lamentablemente, ella y muchas otras mujeres como ella quedaron atrapadas en una sociedad dominada por los hombres que discriminaba severamente a las mujeres. Sus únicas opciones de carrera eran ama de casa o trabajadora en una fábrica.

Como fundador, elegí Torre como el nombre de nuestra empresa en honor a mi abuela y como recordatorio para nuestro equipo: mientras perseguimos nuestra misión de hacer que el trabajo sea satisfactorio para todos, nuestro mayor enemigo es la discriminación. Gracias a inconformistas como Lady Chauvin y muchas otras que la siguieron, la discriminación contra las mujeres pronto será cosa del pasado.

Aún así, hay numerosos otros tipos de discriminación que seguimos aceptando. El entorno socioeconómico de todos los niños en el mundo influye fuertemente en la calidad de la educación que reciben. Con suerte, en un futuro no muy lejano, todos los niños tendrán las mismas oportunidades y acceso a una buena educación. Quizás entonces miraremos hacia atrás y nos daremos cuenta de lo insensatos que éramos al discriminar. En Torre, es nuestro solemne compromiso ser actores clave para lograr ese cambio.

¡Qué maravilloso ramo de rosas fragantes será ese!

Torre

El nombre de la marca Torre fue evaluado y recomendado por Catchword Branding. El logotipo de Torre fue co-creado por Melissa Gaviria, Roberto S. Jalkh y Alexander Torrenegra, y mejorado por Daniela Avila. El icono de Torre fue co-creado por María Moya, Daniela Avila y Alexander Torrenegra. Gracias a Carel Cronje por revisar y comentar sobre las primeras versiones de este artículo.